lunes, agosto 18, 2014

Traducción de la biografía de YOSHIKI. Parte 1. Capítulo 2 - Corazón roto



(Podéis encontrar el resto de capítulos aquí.)

La ceremonia de adiós a Hide terminó el 7 de mayo. Asistieron alrededor de 30.000 personas. El templo de Tsukiji Hongan-ji y todo el barrio estaba lleno de gente. Para mantener el orden, más de 3.000 policías y miembros de las Fuerzas Armadas se vieron involucrados. Patrullas costeras vigilaban las orillas del río Sumida.

Estos días el tema de la muerte, y el funeral del artista en el cenit de su fama eran el sujeto favorito de los medios de comunicación y el dolor general de los jóvenes que no lograban reponerse del shock inicial, incluso de generaciones mayores que no conocían demasiado sobre X.

¿Por qué la muerte de Hide creó semejante impresión en los jóvenes? ¿Cómo su música y la música de X se ganaron los corazones de tanta gente? La amarga ironía en todo esto es que la muerte de Hide había hecho notar la tremenda energía y fuerza del impacto que causaba el grupo X.

Al volver de la cremación, Yoshiki no podía parar de pensar en los fans que continuaban llorando a Hide. ¿Puede que algunos piensen en suicidarse? ¿Puede que quieran dejar este mundo para seguir el alma de Hide al siguiente?

Yoshiki, quien no podía dormir desde su llegada a Japón, no podía parar de pensar en eso.

El 8 de mayo en un programa de radio que se emitía por la noche la emisión fue en memoria a Hide. Yoshiki participó en este programa. El periodista Shoji Noriki, quien conocía de cerca a todos los miembros de X desde sus comienzos, no paraba de retransmitir su devoción por la individualidad de Hide. Durante la emisión Yoshiki intentó hablar calmadamente y con voz clara.

—Yo no albergo ninguna duda sobre los hechos de la muerte de Hide, sé que fue un accidente. Por eso no debemos darnos a la desesperación. Hide vive en mi corazón por eso quiero rendirle homenaje de forma pacífica y pido a todos los fans que hagan lo mismo.

Durante la emisión Yoshiki contó algunas anécdotas divertidas sobre Hide, las contó como si Hide estuviese sentado a su lado.

—Cuando Hide era un niño pequeño, estaba rellenito, no, realmente, estaba muy gordo. Y aunque cuando empezó a tocar en su banda ya había perdido mucho peso, tenía mucho miedo de volverlo a ganar. En tiempos de X, cuando sentía que se pasaba de peso se enfadaba mucho e iba al baño a vomitar. Me daba tanta pena verlo así que a menudo solía decirle: vayamos los dos juntos.

Durante esos días tan ajetreados, ocurrieron demasiadas cosas. Cosas que hicieron que Yoshiki se convirtiese en la persona que es hoy, él no tiene dudas al respecto.

Durante el funeral de su amigo fue informado por miembros de su staff que dos músicos jóvenes que venían de camino al funeral de Hide, murieron en un accidente de coche. Estos chicos eran fans de X, en ese momento trabajaban en Osaka y cuando se enteraron del fallecimiento de Hide se apresuraron hacia Tokyo, pero nunca pudieron llegar. Dolido hasta lo más profundo de su corazón, Yoshiki mandó enviar coronas de flores a las familias de los chicos. Al día siguiente de la ceremonia Yoshiki, con algunos managers y su guardaespaldas Ito fue a visitar a las familias, que vivían en Vadzima, en la península de Noto y en Kyoto. Las familias de los fallecidos no esperaban la visita de Yoshiki, así que le agradecieron sinceramente su preocupación con reverencias muy pronunciadas.

Cuando Yoshiki volvió a casa seguía pensando en muchas de las palabras que jóvenes músicos decían durante el funeral de Hide. Con los ojos llenos de lágrimas no paraban de decir:

—¡Daremos un concierto en memoria de Hide!

—Definitivamente quiero tomar partido en ese concierto —pensaba Yoshiki.

Después del funeral Yoshiki reunió a 400 músicos en Shibuya en conmemoración de Hide. Una vez allí la pregunta sobre el concierto en su memoria se hizo más evidente.

El dolor de perder a un amigo tan querido y un artista tan respetado unió a todos aquellos asociados con la música rock. Naturalmente la idea de reunir a los músicos con los que Hide trabajó en el escenario se hizo evidente, para dejar una imborrable huella en el corazón de todos.

—La única persona que puede llevar a cabo este plan es Yoshiki-san. ¡Hagámosle un concierto homenaje! —Se decían unos a otros.

Amigos, músicos más jóvenes, miembros de compañías discográficas, amigos extranjeros, todos ellos se sumaron a esta propuesta para poder sobrellevar el shock de la muerte de Hide. Parecía lo más correcto, preparar un concierto de ese tipo.

Yoshiki también compartía ese sentimiento. Comentó a la prensa lo que opinaba sobre la posibilidad de llevar a cabo un concierto de memoria de Hide.

Recordando a los 50.000 fans en la puerta del templo Hongan-ji, sus llantos…Yoshiki se preguntó a sí mismo qué podía hacer por esa gente. Si habría alguna manera para aliviarles ese dolor, si así fuese, sería sobre todo, a través de la música.

Yoshiki empezó a dejar de dormir y de comer. Dejó de cuidarse hasta el punto en que parecía que no sabía ni como hacerlo. Pero si era posible hacer algo por Hide, por los fans, usaría todas las fuerzas que le quedasen.

Decidió usar toda su energía para preparar el concierto en memoria de Hide al cumplirse un año de su muerte.

Había otra persona con la que Yoshiki necesitaba hablar para poder llevar a cabo el memorial, Taiji, que repentinamente había aparecido durante la ceremonia.

Había dejado X después de tres conciertos en el Tokyo Dome, que tuvieron lugar desde el 5 al 7 de enero de 1992. Desde entonces se había convertido en una persona completamente diferente.

Después de dejarlos, Taiji se unió al grupo Loudness, como bajista, pero después de un año también se marchó. Luego organizó un grupo llamado D.T.R., el cual empezó a funcionar como un grupo fuerte y de referencia en poco tiempo, sin embargo, eventualmente dejó a este grupo también (D.T.R. se disolvió en julio de 2006).

Después de eso Taiji dejó de comunicarse regularmente con sus amigos cercanos y familia, llegó a desaparecer por completo del panorama musical. Se divorció, cogió su guitarra y las cosas que le eran imprescindibles y dejó su casa. Se convirtió en un vagabundo. Al principio vivió en hoteles y casas de alquiler baratas, luego, cuando el dinero empezó a escasear, dormía a menudo en el parque Ueno. Este estilo de vida duró dos años, un poco más adelante, con la ayuda de su familia pudo alquilar un apartamento, aunque no era capaz de volver a su vida anterior, como músico, tan pronto.

Taiji se perdió a sí mismo en el alcohol y muy a menudo se metía en peleas. Estos últimos días, tras la muerte de Hide, pensamientos tristes, de desesperación, le rondaban la cabeza. Por supuesto, ni Yoshiki ni ninguno de los otros miembros del grupo tenían idea de los malos aprietos por los que pasaba Taiji.

Durante el funeral al responder a la pregunta: —¿Cómo estás?  —Taiji se había limitado a mover la mano y a responder —Bah.

Era imposible reconocer en este hombre al que fuera una vez el apasionado y orgulloso Taiji de los tiempos de X con esa mirada afilada y a veces desafiante.

Vestido con ropa de luto, que era evidente que le habían prestado, había perdido demasiado peso, era un hombre de aspecto enfermizo, los ojos hundidos y el caminar tembloroso e inestable. Taiji sólo tenía 31 años, pero parecía 20 años mayor. Era increíble lo mucho que su cara había cambiado. La mandíbula torcida y cuatro dientes frontales los tenía rotos. En una pelea en Shibuya, lo habían golpeado severamente. Este hombre roto no tenía nada que ver con el brillante y estiloso bajista Taiji.

Sin duda, Yoshiki, el líder de X fue quien forzó a Taiji a marcharse del grupo. El 1 de enero de 1992 a las 5 de la madrugada, llamó al bajista y le anunció: —Ya basta, se acabó. Estás despedido con efecto inmediato.

En el calor del momento Taiji le dijo palabras muy duras a Yoshiki, pero el líder se mantuvo firme en su decisión. Fuese lo que fuese lo ocurrido entre ellos, Yoshiki no iba a cambiar de opinión.

Cuando Taiji se unió al grupo inmediatamente se convirtió en una fuente de controversia, Yoshiki tenía que hacerle frente. Constantemente provocaba conflicto criticando a los demás. Incluso Hide había tratado de hablar con él y de hacerlo entrar en razón. Con quien mantenía más tiranteces era con Yoshiki, pero el grupo necesitaba el bajo de Taiji.

La razón principal por la que Yoshiki decidió echar a Taiji fue porque rompió a la primera ocasión el juramento que se habían hecho unos a otros. Yoshiki, simplemente no pudo perdonarle esto.

Al volver a ver a Taiji en el funeral, Yoshiki estaba tan conmocionado por el aspecto exhausto del que fuera su bajista original. Parecía imposible que pudiera cambiar tanto. Cuando rememoró la salida de Taiji del grupo el corazón le dio un vuelco.

Uno de esos días, aún borrosos tras el funeral, alguien contactó con Yoshiki, un amigo en común.

—Yoshiki-san, por favor, ¿podrías quedar con Taiji-san?, me pidió que te diese este número, por favor, llámalo.

Yoshiki pudo recordar con claridad lo cambiado que estaba Taiji.Figura esquelética, los dientes rotos, manos temblorosas…

Sin dudarlo, llamó inmediatamente al número que acababan de darle.

—Taiji, soy Yoshiki, si quieres que nos veamos ven.

Unos días más tarde Taiji apareció en la cafetería del hotel en el que habían quedado. Tenía peor aspecto que la última vez. Sin la ropa de luto aún parecía más delgado.

Yoshiki le entregó un sobre que traía preparado y empezó a hablar sin ningún tipo de reverencias.

—Para empezar, ve al dentista.

En el sobre había dos millones de yenes. Taiji miró brevemente el sobre y no pudo esconder su sorpresa. Yoshiki, conociendo la naturaleza cabezota del bajista, continuó hablando para que no pudiese rechazarlo:

—No puedo decir que te entienda. Nunca me han pegado, ni he perdido dientes. ¡Pero eso no es lo peor, Taiji! Es una lástima que nunca podamos volver a reunirnos los tres a charlar con Hide. Así que primero, ve a que te arreglen los dientes, ven dentro de un año para conmemorar la muerte de Hide, nos vemos.

Después de estas palabras Taiji no pudo rechazar la ayuda que le ofrecían. En silencio cogió el sobre, se levantó y se fue. Yoshiki miró como Taiji se alejaba pensando en lo rápido que pasa el tiempo.

Allá a donde fuera, en coche, en tren, caminando por la calle, Yoshiki no podía evitar buscar con la mirada a Hide por todas partes. No podía resistir este impulso. Por ese entonces pasaba las noches llorando la muerte de su amigo.

Cada vez que surgía un pequeño imprevisto no era capaz de consolarse, Yoshiki preguntaba desde su corazón a Hide, qué era lo que debía hacer, le pedía consejo. Pero este nunca respondía.

Desde que Yoshiki había llegado a Japón el 3 de mayo no podía hablar con Hide. Y aunque la voz de Hide resonaba fuerte en los oídos de Yoshiki, no respondía a ninguna de sus preguntas. Este indescriptible sentimiento de haber perdido una parte importante que formaba parte de su ser le llenaba el corazón de pena. Una noche mirando su reflejo en un cristal se preguntó cómo sería dejar atrás esta vida que ahora le pesaba tanto, que parecía moverse tan deprisa, para existir sin moverse y sin necesidad de pensar, puede que eso trajese paz a su alma. —Hide, ¿qué hago ahora?

Cuanto más trataba de entender la realidad de lo que significaba morir más sobrecogido se sentía sobre la pérdida de Hide.

Las palabras que hacía unos días había dicho a los fans: —Aceptemos la muerte de Hide y cuidemos de su sueño eterno con cariño.

—Menudo consejo vacío —pensaba ahora.

Yoshiki sentía tantas emociones encontradas que sentía que se dividía a sí mismo. Parecía que su mismo corazón se había roto en dos mitades. La parte que luchaba por sobrevivir y la que quería rendirse al dolor.

Aún no habiendo entendido del todo la valía de perder a un amigo tan amado, esperaba y esperaba respuestas de Hide, quien en realidad ya no sería capaz de contestarlas.

*Traducido por Diana Abuín, traductora de X Japan Spain
Por favor no compartir sin créditos, gracias

4 comentarios:

  1. GRACIAS!!,muy buena traduccion...ahi partes que cuenta de Taiji q me parecen innecesarias...pero bueno

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  2. Parece historia Yaoi *-* en fin no hay mucha diferencia ya que Yoshiki amó a Hide como a nadie, palabras de su boca...

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  3. A comparación de la historia de Taiji que también cuenta su tormentosa relación que se vino días antes de que terminara con X japan, creo que el pobre Taiji escondía mucho.
    Gracias por tu trabajo.

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